Para hacer el comentario literario, analizamos el fragmento de don Melón y doña Endrina, de el libro de buen amor.
Pero tal lugar no era para conversar de amores; acometiéronme luego muchos miedo y temblores, los mis pies y las mis manos no eran de sí señores, perdí seso, perdí fuerza, mudáronse mis colores.
Pero tal lugar no era para conversar de amores; acometiéronme luego muchos miedo y temblores, los mis pies y las mis manos no eran de sí señores, perdí seso, perdí fuerza, mudáronse mis colores.